La comisión directiva de Independiente dejó un mensaje claro al Manager y al cuerpo técnico: bajar el presupuesto del plantel en un 40%. ¿Qué significa esto? Que buscarán renegociar los contratos más altos hasta diciembre y, caso contrario, dar a préstamo o vender a los jugadores más grandes.
Esta medida parece drástica, pero suponen que -de instrumentarse- será la transición necesaria para acomodar los números. Por lo tanto, Lucas Pusineri y Jorge Burruchaga deberán trabajar para organizar un plantel con muchos juveniles y acomodarse con lo que hay dentro del club; más allá de que el DT pedirá refuerzos acorde a los que se vayan.
Puesto a puesto, ¿qué pibes podrían tomar protagonismo? En caso de que se vaya Martín Campaña, sería Renzo Bacchia quien pelearía el puesto con Milton Álvarez. En defensa, la salida de Gastón Silva y el interés de Estudiantes de La Plata por Juan Sánchez Miño, reposiciona a Thomás Ortega. Lo mismo sucede con Sergio Barreto, reemplazante natural de Alan Franco en la zaga central. Luego aparecen chicos que pujan por un lugar en el plantel profesional, como Juan Di Lorenzo y Facundo Lando.
En la mitad de la cancha, el club deberá resolver la situación de Diego Mercado, el mediocampista central al que se le vence el contrato a mitad de año; más aún si Lucas Romero y Carlos Benavidez tienen el cartel de “venta”. Allí se encuentran Lucas González y Alan Soñora, que terminaron jugando los últimos partidos antes de la pandemia.
En la delantera figuran los jugadores que más se han destacado en 2020: Alan Velasco y Brian Martínez. Son dos chicos que sorprendieron al DT y también al público en general. Ambos ocuparían los extremos para abastecer al 9 y asociarse en la generación de juego. Otro juvenil al que subirán será Juan Da Rosa, de actuación destacada en la Reserva.
Por supuesto que regresarán futbolsitas como Gonzalo Asís, Nicolás Messiniti, Nicolás Del Priore, Ezequiel Denis y Elías Contreras, que serán evaluados luego de sus préstamos en el ascenso.
