Sergio, un comerciante del casco céntrico, habló con el Grupo de Medios TVO respecto a la difícil situación que atraviesa el sector y además confió que pese a que fueron autorizados a abrir sus puertas, las ventas «no remontan» y eso genera incertidumbre y preocupación. «La parte comercial está pasando por un momento muy duro. El movimiento no cambió en absoluto, la única diferencia es que hay más gente, pero el consumo es bajísimo», comenzó.
Agregó que «estuvimos casi 60 días cerrados totalmente y con eso se generaron deudas»; asimismo aclaró que «ya venimos muy golpeados desde hace dos años con la recesión y esto nos pegó aún más duro».
«En el centro los que tenemos comercio apostamos al tráfico de personas», asintió y recalcó nuevamente que «la parte económica está durísima».
