En una jornada plagada de situaciones, todo terminó en paz y las elecciones superaron por 12.000 votantes a la pasada, que había sido la de mayor presencia. Fueron 38.500 socios a poner su voto y la fórmula de Ameal-Pergolini-Riquelme sería la ganadora.
Boca Juniors celebró elecciones el domingo para renovar autoridades que se anticipan complicadas para un oficialismo que intenta mantenerse al frente del club tras 24 años ininterrumpidos.
La irrupción en escena de Juan Román Riquelme, ídolo indiscutido de la parcialidad «xeneize», podría inclinar la balanza en favor de una de las listas opositoras y amenaza la continuidad de un poder que trasciende lo meramente deportivo.
Tal vez por todo lo que hay en juego, el candidato oficialista Christian Gribaudo apeló a la figura del ex campeón mundial Diego Maradona para intentar recuperar adeptos y evitar el cambio.
Uno de los primeros en votar fue el actual presidente de Boca, Daniel Angelici, quien aseguró que «hubo pocas propuestas» en la campaña previa a las elecciones del club de La Ribera, a la vez que consideró que además hubo «falta de la verdad».
En tanto, el candidato a presidente por una de las listas opositoras de Boca, Jorge Amor Ameal, señaló que «hay que terminar con la mentira y soñar con un club mejor» tras arribar a La Bombonera para emitir su voto.
«La gente quiere un cambio y el cambio lo va a producir. Hay que terminar con la mentira y soñar con un club mejor», reveló, tras lo cual resaltó: «Boca económicamente está bien, pero a espaldas de los socios».
Con concurrencia récord, se realizaron los comicios en Boca
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