En una sesión extraordinaria, el Senado de la Nación sancionó la «Ley de Góndolas» que establece límites a la exhibición de productos de las grandes marcas y otorga más oportunidades a pequeños y medianos productores nacionales.
Con el visto bueno de Diputados, que ya le había dado media sanción en noviembre del año pasado, el Senado de la Nación aprobó la «Ley de Góndolas». El objetivo de esta ley es garantizar a las PyMEs, a los actores de la economía popular y de la agricultura familiar una mayor participación en las góndolas y mejores condiciones de negociación entre las empresas grandes y las medianas o pequeñas. Todo esto, a los efectos de lograr una mejora sustancial de precios para el consumidor.
El presidente del Interbloque de Juntos por el Cambio y del Bloque UCR en el Senado de la Nación, Luis Naidenoff, aseguró que «estas medidas son prometedoras y pueden llegar a beneficiar a consumidores y productores, pero la realidad en la Argentina nos indica que los monopolios y el abuso de posición dominantes son un problema de larga data, que necesita una solución».
Para tener una idea, «del 2001 al 2016, las 500 empresas más grandes de argentina pasaron a representar del 14% al 24% del PBI. Entonces, la concentración del mercado es un problema que requiere de un Estado activo e inteligente para intervenir y corregir estas distorsiones».
No obstante, el Senador por Formosa tomó recaudos: «en el contexto actual, esto es un catálogo de buenas intenciones, tal cual está redactada la ley».
Y destacó el problema de la fiscalización resaltando que «tenemos que saber separar una intervención inteligente, que aporte equilibrio y equidad a la economía, de una intervención con mirada persecutoria. Como lo expresa el artículo 18° del proyecto, donde se delega el poder de policía del Estado en cooperativas de la economía popular y cámaras empresarias. En el pasado reciente tuvimos funcionarios que creían que a los gritos y con amenazas se podía regular al mercado. Ese modelo fracasó». Por eso el Interbloque de Juntos por el Cambió votó en contra de este artículo. «No podemos dejar que esta ley sea una herramienta de apriete», afirmó Naidenoff.
Por último, el senador reflexionó: «esta ley no es una herramienta para corregir distorsiones. En el mejor de los casos, estamos tratando de brindar un incentivo para aumentar la participación de PyMEs y sectores populares en la economía».
«Va a ser desafío del gobierno llevar adelante las políticas que consideren necesarias, y usar estas herramientas, para resolver estos problemas y poner en marcha la economía argentina», cerró diciendo.
