El a la pivote venezolano llega a La Gloria para reforzar el equipo de Sebastián Ginóbili. Viene de jugar en Europa y es una figura destacada con una amplia trayectoria.
Con 33 años y 2.03 metros, Colmenares se convierte en un nuevo refuerzo albirrojo para la temporada de inminente comienzo. El venezolano tiene una vasta trayectoria en equipos latinoamericanos y europeos, además de pertenecer a la selección de su país. Había tenido su paso por Argentina, cuando en 2011 integró el conjunto de Unión de Sunchales que competía el Torneo Nacional de Ascenso.
“La Bestia” vistió las camisetas de Cocodrilos de Caracas (2006, 2012, 2014 y 2015), Unión de Sunchales (2011), Huracanes de Tampico (2011-2012), Abejas de León (2013-2014), Club Trouville (2014-2015), Guaros de Lara (2015-2019), Maccabi Haifa (2019-2020). Además, el caraqueño participó con la selección nacional venezolana en la Copa del Mundo que se llevó a cabo en China en 2019.
«Me sumo a un equipo ganador»
Nestor Colmenares se transformó en la nueva ficha de Instituto de cara a la temporada que iniciará en los próximos días de La Liga Nacional. “Mi expectativa es ayudar, tanto al equipo como a mis compañeros, a ganar los máximos juegos que sean necesarios”, expresó.
Uno de los fichajes más importantes sumó La Gloria a pocos días de debutar en la temporada. El ala pivote es oriundo de Venezuela y viene de jugar en su última participación en Maccabi Haifa de Rumania. En los próximos días arribará al país pero esta no será su primera experiencia en Argentina. El venezolano ya había tenido su paso en 2011, en Unión en Sunchales donde jugó el Torneo Nacional de Ascenso.
Colmenares tiene una gran trayectoria como basquetbolista, 14 años integrando equipos de diferentes ligas lo nutrieron de experiencia y lo convirtieron en una gran figura que lo hacen ser disputado por los clubes en el mercado de pases, pero en los próximos días estrenará la casaca albirroja.
Respecto a su decisión de elegir a Instituto el caraqueño explicó: «Me han hablado muy bien de este equipo, que son muy serio y son ganadores” y como todo jugador con aspiración profundizó: “Vengo a ayudar en lo que pueda para ganar todos los juegos posibles».
Debido al contexto mundial que se está viviendo, su llegada al país se vio retrasada por los requerimientos necesarios para poder ingresar, lo que le da poco margen, casi nulo, de trabajo previo con el equipo. «Será duro por tener poquito tiempo de adaptación, pero sé que tenemos un buen técnico y buenos jugadores», expresó el flamante refuerzo y añadió que estuvo en contacto con el Sepo. «He hablado con el entrenador, me dio la bienvenida y se puso a disposición de ayudar en lo que está a su alcance”, cerró.
