Peligro en las calles: juntas separadas del pavimento amenazan la seguridad vial

En diversas calles de la ciudad de Formosa, las juntas del pavimento se encuentran separadas, generando un riesgo real para los conductores, especialmente para los motociclistas, quienes son los más vulnerables a este tipo de inconvenientes. La problemática de las juntas mal selladas o desplazadas ha ido en aumento, y con ello, también los incidentes de tránsito, algunos de los cuales han terminado con caídas y lesiones para los conductores.
Este deterioro en las calles, que se observa principalmente en avenidas principales y calles secundarias de barrios céntricos y periféricos, representa un peligro constante para los usuarios de vehículos de dos ruedas. Las juntas de pavimento, que son esenciales para la expansión y contracción del asfalto debido a las temperaturas, con el paso del tiempo se han ido desajustando. Esto ha generado hendiduras y saltos en la superficie, dificultando la circulación y aumentando el riesgo de accidentes.
Motociclistas, en particular, han sido los más afectados por este fenómeno. En varios casos reportados en las últimas semanas, conductores de motocicletas han perdido el control al pasar por estas zonas afectadas, provocando caídas que no solo son dolorosas, sino que también generan consecuencias graves en su salud. La falta de mantenimiento adecuado en las juntas es vista como una de las principales causas de estos accidentes, lo que exige una rápida intervención de las autoridades locales.
Expertos en seguridad vial alertan sobre el alto riesgo que estas juntas representan, especialmente cuando se encuentran en intersecciones o en calles de alto tránsito.

Los reclamos
de los ciudadanos

Vecinos de distintos sectores de la ciudad capital han levantado la voz para exigir a las autoridades una pronta solución a esta situación. «Es imposible conducir tranquilo por algunas calles, sobre todo en las noches cuando no se notan bien las imperfecciones. Las motocicletas, en especial, corren un alto riesgo», comentó una vecina del casco céntrico, quien ha sido testigo de varias caídas de motociclistas cerca de su hogar.
«El daño en las juntas es como una trampa para las ruedas de las motocicletas. Al ser una interrupción brusca en la superficie del pavimento, el conductor puede perder el control y caer fácilmente», aseguró un motociclista consultado al respecto.
Los conductores de automóviles también han señalado que, aunque no están tan expuestos como los motociclistas, las juntas separadas pueden causar daños a los vehículos y comprometer la seguridad general del tránsito. «Es común que se rompa la suspensión de los autos cuando se pasa por estas hendiduras», afirmó un conductor.

Un llamado
urgente
a la reparación

La falta de una intervención inmediata pone en evidencia una deficiencia en el mantenimiento de las calles, que en muchos casos no ha sido atendida de forma adecuada en los últimos años. Los ciudadanos exigen que la Comuna asuma la responsabilidad y acelere las obras de reparación de las juntas de pavimento, así como la mejora en la señalización vial para alertar a los conductores sobre los puntos más peligrosos.
En este sentido, las autoridades ya han reconocido la magnitud del problema y en muchos casos iniciaron obras de reparación en las zonas más afectadas. Sin embargo, muchos usuarios del tránsito insisten en que las acciones deben ser más rápidas y eficaces, ya que cada día sin solución implica más riesgos para quienes transitan por las calles de la ciudad.
Mientras tanto, tanto los motociclistas como los conductores de automóviles siguen expuestos a los peligros que representan las juntas separadas, esperando que las autoridades actúen con celeridad para evitar que este problema cause más víctimas en el futuro.
El mal estado de las calles, en particular las juntas separadas del pavimento, constituye una grave amenaza para la seguridad vial. Es fundamental que se tomen medidas inmediatas para reparar las vías y evitar que más accidentes ocurran, en especial entre los motociclistas, que son los más vulnerables. La prevención debe ser la prioridad de las autoridades locales para garantizar una circulación segura para todos los ciudadanos.

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