Se escondió en un ropero para atacar a su ex y mató a su cuñado: cayó 13 años después

Un hombre que en julio de 2006 mató de una puñalada a su cuñado en Ilhabela, en el estado brasileño de San Pablo, fue capturado en la localidad misionera de San Javier, donde había formado una nueva familia y se desempeñaba como albañil.
César Javier Da Silva (40) estuvo preso dos años y cinco meses por ese crimen, pero fue excarcelado porque la realización del juicio se demoró y un juez decidió dejarlo en libertad mientras continuaba el proceso.
Al poco tiempo Da Silva dejó de reportarse a la Justicia de Brasil y desapareció. En 2018, 12 años después de haber asesinado a su cuñado, fue juzgado en ausencia y condenado a 14 años de cárcel. Esa sentencia derivó en un pedido de captura internacional.
Da Silva se había radicado en la turística localidad de Ilhabela con su esposa, Luci Catani, a principios de 2000, después de casarse en San Javier.
La pareja se separó y el ahora detenido retornó a su pueblo algunos meses, mientras que la mujer se quedó en Brasil junto a sus hijos.
Cuando Da Silva regresó a Ilhabela e intentó retomar la convivencia, Catani se opuso y obtuvo de la Justicia una restricción de acercamiento.
En julio de 2006 el hombre irrumpió en la propiedad y la mujer acudió a la Policía, que lo retiró del lugar. Ese mismo día, Da Silva intentó incendiar la casa con su ex esposa e hijos en el interior.
Catani contó que al día siguiente decidió irse a vivir junto a su hermano Rogelio, que también estaba en Ilhabela. Primero llevó a sus hijos y cuando retornó a buscar sus cosas se topó con Da Silva escondido en un ropero y armado con un cuchillo.
La mujer recibió una herida cortante en el pecho y su hermano intervino para defenderla pero terminó con una puñalada que minutos después le causaría la muerte.
Da Silva fue detenido y permaneció tras las rejas casi 30 meses, hasta que fue beneficiado con la excarcelación con la condición de que se reportara periódicamente a la Justicia, lo cual no cumplió.
Se cree que abandonó la isla en forma inmediata y vivió algún tiempo en el sur de Brasil. Hace dos años aproximadamente retornó a su San Javier natal, donde volvió a radicarse.
El sábado, agentes de Inteligencia Criminal de la Policía de Misiones y de Interpol Argentina lo hallaron cerca de su casa, sobre la calle Andresito, y lo detuvieron.
El prófugo fue puesto a disposición de la Justicia Federal a la espera del proceso de extradición.

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