Semana de los y las Estudiantes: “Mi héroe”

No puedo enfrentar a ese demonio, soy un cobarde, un inútil para luchar contra él. Envidio tu valentía, eres un héroe, siempre has luchado; sé que la victoria será tuya. Eres un gigante, un héroe que inspira a muchos.

Sigue adelante, aunque el camino no es fácil. En muchas ocasiones, nos hemos aliado con ese demonio y te hemos atacado, agredido, menospreciado y discriminado negativamente. Pero te aseguro que es solo por falta de comprensión y entendimiento de esta situación difícil.

Dicen que es un camino de ida, pero debes volver, sin escapar, venciendo a ese demonio que se ríe y espera su momento de avanzar. Estás ahí, sé que no conoces el miedo, al igual que los leones. Sigue luchando, eres nuestro héroe y el de muchos más.

No puedes hablar porque el demonio te tiene amordazado, pero sabemos que estás luchando. Estamos aquí, arrojando todas las armas que tenemos para ayudarte a cortar esa mordaza. No podemos hacer más, pero sabemos que tú puedes.

Es difícil, pero está demostrado que ese demonio tiene sus flancos débiles. Lo vas a lograr, eres mi héroe, nuestro héroe. Un héroe no se rinde, muere dando pelea. Sigue, hay más armas, ya las vamos a conseguir y te las alcanzaremos.

Voy a tratar de distraerlo con unas palabras; tú prepara algunas de tus armas para aniquilarlo y vencer. Para volver a estar en familia de nuevo.

Y a ti, demonio, que no mereces mi respeto ni el de ninguna persona de bien, sino todo mi desprecio, te digo que jamás nos harás bajar los brazos. Seguiremos luchando contra ti hasta el último aliento de nuestras vidas.

Es verdad que hasta hoy has ganado algunas batallas, pero jamás lograrás nuestra rendición. La humanidad va a ganar esta guerra porque nuestros científicos están cada día más cerca de lograr el arma mortal en tu contra.

Tengo la fe en la futura arma del día después, la bala de plata que terminará con tu amplia sonrisa. En algún momento de nuestra historia, todos y todas te van a tomar, y dejarán de perder su libertad o su vida.

Hasta hoy estás con más batallas ganadas, pero la guerra contra ti es para siempre. Cada avance de la ciencia nos acerca cada día más a destruir tu poder adictivo. Ese momento llegará y así serás condenada a ser un vicio más que podremos dominar a nuestro antojo.

J.R Lezcano 
             
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