Tragedia en Mendoza: un niño murió tras ser atropellado por un colectivo

Un terrible episodio enlutó a toda la comunidad de la localidad de Las Heras, en Mendoza. Un chico de un año y ocho meses murió en la madrugada del miércoles tras ser atropellado por un colectivo cuando volvía a su casa junto a sus primos después de ir a pedirle leche a una vecina.
El accidente se produjo cuando Thiago Yahir Videla, que estaba en la vereda, en circunstancias que aún se investigan cruzó la calle corriendo y fue embestido por el interno 72 de la línea 401, correspondiente a la empresa Trapiche, en la intersección de las calles Lisandro Moyano y Paso de los Patos en el barrio Sismo V.
El niño fue llevado de inmediato al Hospital Ramón Carrillo, donde los médicos informaron que ya se encontraba sin vida al ingresar y no hubo nada para hacer. Tras el hecho, vecinos de la zona atacaron a pedradas al colectivo, pero otras unidades de la empresa que pasaban intervinieron para dispersarlos junto a efectivos de la Policía local.
Sin embargo, según informó el diario El Sol, el conductor del colectivo, de 29 años, quedó en libertad y no será imputado por el accidente, ya que varios testigos declararon ante la Justicia mendocina que a pesar de que no llegó a frenar, iba a la velocidad correspondiente y no realizó ninguna maniobra indebida.
Iris Pucheta tiene 50 años y es la encargada del merendero Lechucita Encantada, al que Thiago iba asiduamente junto a sus primos a buscar leche y alimentos. Según explicó Iris a Infobae, el lugar está ubicado literalmente a la vuelta de la casa del padre del menor y los niños no deben cruzar ninguna calle para llegar.
El padre, que está separado de la madre del chico atropellado, se encontraba trabajando esa noche en una panchería de la zona, por lo que Thiago había quedado al cuidado de su tía paterna junto a sus primos. Unos minutos antes de la medianoche, todos juntos salieron caminando hacia la casa de Iris para pedir leche. “Acá es normal que la gente del barrio venga a cualquier hora a pedirme, incluso los niños, porque tienen confianza. Sea la hora que sea yo los atiendo”, contó la mujer.
“Yo ese día estaba con un ataque de asma muy grande. Por lo general los acompañamos a caminar esa media cuadra, pero ese día no lo hice y por eso me siento responsable”, se lamentó. “Me quedé dormida y a la mañana prendí el televisor y me enteré del accidente. Cuando escuché la hora que fue me empecé a desesperar, y cuando dijeron su nombre se me cayó el mundo abajo”.
Tras el hecho, sin embargo, en redes sociales comenzaron a multiplicarse las críticas y agresiones contra la madre de Thiago, que tiene además otros dos hijos chicos de otra relación. Pero Iris la defendió.
“No la conozco, pero la defiendo como mamá y como mujer”, dice. “Esas crueldades que se vienen haciendo, como lo que pasó con este chico Brian que fue presidente de mesa, realmente no las entiendo. Es mucha agresión. Me molesta la gente que no hace nada nunca por el otro, por los niños, y critica gratuitamente”.
Y continuó: “Tienen que darse cuenta que todos somos seres humanos. Así como le pasó esto a una persona con pocos recursos le puede pasar a una mamá con una pileta en un country que te descuidás cinco segundos y se te accidenta un hijo. No por eso todas las madres son irresponsables. Me duele ver a mujeres contra mujeres, necesitamos ser un poco más empáticas”.

Comentarios Facebook

Lo más leído