Siguen paseando sus perros de raza dogos y pitbulls sin bozal ni correa por los espacios públicos poniendo en peligro la integridad de los niños pequeños, sobre todo. Esto pasa mucho en el Estadio Cincuentenario, en el Paraíso de los Niños y la plaza SAN Martín ante la mirada tranquila de policías. Como servidores públicos deben advertir a los dueños de estas mascotas que deben tener seguridad ¿o acaso están esperando un ataque para hacer algo?
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