«Yendo, amor, en el lugar que arreglamos» : los mensajes que resolvieron el caso del hombre degollado en Junín

Un auto estacionado debajo de un árbol y aparentemente sin ningún conductor sentado al volante fue lo primero que le llamó la atención en las últimas horas a una vecina que había ido a correr al predio del Parque Ecológico de Junín. Al acercarse, descubrió el cuerpo de un hombre recostado sobre el asiento delantero y empapado en sangre. Así salió a la luz un dramático caso de violencia de género que terminó en una venganza criminal.
La víctima se llamaba Marcelo Torres, era albañil y tenía 34 años. Lo habían degollado y dejaron su cuerpo dentro del vehículo, pero cuando lo encontraron todavía tenía encima sus documentos y el teléfono celular por lo que la hipótesis de un robo quedó descartada casi desde el principio.
Las cámaras de seguridad en primer lugar y después el entrecruzamiento de información sobre la actividad de los celulares de los involucrados en la causa terminó de revelar la trama oculta que derivó en el homicidio por el que se encuentra detenida la expareja de Torres, Vilma Verón, y el novio actual de la mujer, Gustavo Arrieta.
De acuerdo a la reconstrucción que pudo hacer el fiscal a cargo de la investigación, Sergio Terrón, minutos después de la medianoche del martes la víctima recibió un llamado mientras se encontraba en la casa de su padre. “Ya voy”, fueron las últimas palabras que le escuchó decir a su hijo el hombre, y Torres salió enseguida a la calle.
El recorrido del Renault Clío del albañil asesinado fue registrado por al menos cinco cámaras del municipio y alrededor de las 1.06 se lo observa ingresar al Paseo Ecológico, donde ocurre el crimen. Gracias al relevamiento también se pudo establecer que Torres llega a la zona acompañado por una mujer rubia que vestía una remera roja y, poco antes, otra cámara captó a Vilma Verón caminando al encuentro de su ex vestida con una prenda similar.
Después, la coartada de la sospechosa se cayó apenas los investigadores lograron recuperar los mensajes y llamadas por Whatsapp que había borrado de su celular. Así fue como se supo que Verón había acordado encontrarse con Torres a las 12.40 y a la 1.06 le mandó un chat a su pareja Arrieta para avisarle que estaban llegando al lugar. Todos estos elementos fueron prueba suficiente de la participación de la pareja en el crimen del albañil y el fiscal ordenó su aprehensión.
Al momento de la detención, Verón tenía escoriaciones en una rodilla y en ambos muslos, y Arrieta. presentaba lesiones en la espalda y en el brazo derecho, compatibles a una pelea.
Por otra parte, indicó Télam, también surgió en la causa que el hombre asesinado había sido condenado a una pena de seis meses de prisión, después de que su expareja y ahora detenida acusada de matarlo, lo denunciara por violencia de género.

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