Como ya sucediera con varias entidades que regulan el deporte a nivel nacional, la Federación Argentina de Box (FAB) recibió el aval de la Secretaría de Deportes de la Nación, en cuanto al protocolo presentado para la vuelta a la práctica de la disciplina, en el marco de la cuarentena producto del coronavirus.
El subsecretario Daniel Díaz se comunicó con el presidente de la FAB, Luis Romio, informándole que el protocolo de medidas de seguridad y prevención que la federación había presentado oficialmente a fines de mayo, cuenta con el aval de aquel organismo.
En la medida en que cada provincia y ciudad habilite la apertura de gimnasios y clubes de boxeo, la práctica deberá regirse por dicho protocolo, a ser respetado de manera estricta.
“El siguiente paso es el trabajo coordinado que tendrá como actores principales no sólo a la FAB y a la Secretaría de Deportes, sino fundamentalmente a los gobiernos provinciales, las federaciones y asociaciones de boxeo de cada distrito y fundamentalmente los encargados de gestionar los establecimientos. Será fundamental la responsabilidad y solidaridad de todos los involucrados para que los pequeños pasos que se vayan dando garanticen la salud de las personas, a las que debemos considerar como bien absolutamente prioritario”, detalla la FAB en un comunicado.
“Teniendo en consideración la información médica y las recomendaciones realizadas oportunamente por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Ministerio de Salud de la Nación, se presentan estas guías a modo de sugerencias con el fin de implementar las mismas para garantizar el cuidado de los deportistas y todas las personas involucradas en la actividad, ya sea en gimnasios de entrenamiento o realización de eventos”.
Asimismo, se destaca que no podrá participar por el momento “toda persona que integre grupos de riesgo en materia de salud”, y resalta que se deberá “reducir la capacidad normal de la sala de entrenamiento a fin de respetar el espacio mínimo requerido para cada atleta o entrenador, considerado de 4 metros cuadrados por persona”.
La entidad que rige el boxeo profesional y amateur en la Argentina solicita “estricta higiene en vestuarios y sala de entrenamiento, como también elementos de higiene en el ingreso al local a fin de limpiar calzado, al ingreso del gimnasio de box y durante el entrenamiento y su respectiva salida. Se deberá solicitar a la persona que ingrese a entrenar, guardar su vestimenta con la que ingresa en una bolsa o mochila”.
Y subraya que “una vez finalizado el entrenamiento el lavado de manos debe ser obligatorio. Ninguna persona que practique boxeo en forma recreativa o deportiva realizará entrenamientos superiores a los 60 minutos”.
El uso de barbijo y guantes de látex para las personas a cargo del entrenamiento será obligatorio, como también “la limpieza de los elementos utilizados y el evitar el contacto con elementos comunes como puertas, barandas, máquinas, barras, bolsas y demás. Cada persona deberá usar su propio equipamiento para su sesión de entrenamiento”.
Entretanto, habrá una planilla de control y se tomará la temperatura de las personas antes de ingresar a los gimnasios, quedando “prohibida la utilización de toallas o toallones durante el entrenamiento, así como tampoco se podrá salivar ni realizar secreciones nasales externas, causante de una contaminación en ropa o en el aire, ni compartir las botellas para hidratación”.
