Ayer en la sucursal bancaria frente al Alta Complejidad observé con preocupación a una pareja de policías (femenino y masculino) con un perro ovejero, «perro policía» atado con tanta sed que sacaba la lengua hasta el piso. Por favor denle agua a ese animal que estaba trabajando. Un móvil policial puede alcanzarle un balde de agua. Yo estaba en la gila para el cobro y en toda la mañana no sació su sed. Más sensibilidad por favor, la comunidad observa…
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