El discurso navideño de Felipe VI desató la ira del separatismo catalán

El mensaje navideño del rey de España, Felipe VI, ofuscó a los independentistas catalanes, que reaccionaron acalorados, mientras que un amplio arco político, desde la izquierda a la derecha, lo aprobó.
Una de las «serias preocupaciones que tenemos en España» es Cataluña, dijo Felipe VI y acotó que las otras son la nueva era tecnológica, el rumbo de la Unión Europea, los movimientos migratorios, la desigualdad laboral, el cambio climático, la falta de empleo y el deterioro de la confianza de los ciudadanos en las instituciones.

«El mundo no vive tiempos fáciles», dijo y agregó que son momentos de «incertidumbre, de cambios profundos y acelerados que provocan en la sociedad preocupación e inquietud».

En elíptica referencia a la crisis independentista catalana, el rey dijo que es necesario anteponer a los valores individuales, los colectivos para destacar la Constitución como marco en el que se sostienen «nuestra convivencia, nuestros proyectos comunes, nuestros sentimientos y nuestras ideas».

El presidente de la Generalitat (gobierno catalán), Quim Torra, reaccionó con dureza y dijo que «lo que es una seria preocupación es el Estado español hoy en Europa». «Es un Estado que vulnera los derechos humanos, que incumple las resoluciones de los tribunales de justicia europeos y que niega a los catalanes a ejercer su derecho a la autodeterminación».

A su vez, el presidente del grupo de ERC, el independentista Ernest Maragall, consideró que las palabras del rey «bordearon la irrelevancia», pues representó «una mezcla de buenas palabras y pomposidad vacía, sin ningún contenido real». Y más aún, a su juicio, Felipe VI representa la «degradación» del pacto constitucional de 1978.

El Partido Socialista Obrebro Español, Podemos, Partido Popular (PP), Ciudadanos y Vox alabaron el discurso.

La presidenta del PSOE, Cristina Narbona, opinó que el monarca identificó «con nitidez los retos, las preocupaciones y las fortalezas que tiene la sociedad española en este momento». Se trata de desafíos como «el problema de Cataluña» que él «reconoce» y que «entiende que somos capaces como sociedad de enfrentarlos juntos, como hemos hecho hasta ahora desde que tenemos un sistema democrático y un Estado social y de derecho», señaló.

Podemos, habitualmente crítico a la postura de Felipe VI respecto del reclamo soberanista catalán, valoró lo que consideró un giro hacia la moderación que realizó el rey. Su secretario de Acción de Gobierno, Pablo Echenique, consideró que demostró «mejor olfato político ante la nueva época que se abre» que el que mostró en su discurso tras el referéndum por la independencia en Cataluña en 2017.

El líder del PP, Pablo Casado, afirmó en su cuenta de Twitter que el rey «volvió a defender la vigencia de la Constitución y la unidad de España». También desde la red social, el líder de Vox, Santiago Abascal, aplaudió lo que llamó «la sensatez y templanza» del mensaje, del que destacó la frase: «Confiemos en España y mantengámonos unidos».

Comentarios Facebook

Lo más leído