El concejal Fabián Olivera pidió a las autoridades provinciales que abandonen «el método de la política abarata» con la administración de los módulos habitacionales de la ciudad, y consideró que, «de nuevo, se impone regresar al sorteo público para garantizar equidad y respeto en la distribución de estas unidades».
«En las últimas semanas, el Gobierno provincial apeló, como lo hace siempre que crecen las manifestaciones en su contra, a la improvisación y al apuro para repartir unos muy pocos módulos; lo hizo entre gallos y medianoche, casi a escondidas», aseguró el legislador municipal del radicalismo.
«Quiero insistir con que en la ciudad hay más módulos que familias demandando las unidades; es inconcebible que se de este escenario, mientras arrecian los discursos de campaña que se usan para estos casos, con los que los funcionarios de turno avivan las banderas de un peronismo nacional y popular, cuando en realidad los hechos van en total contramano», advirtió.
«En los últimos días mantuve decenas de reuniones con vecinos que esperan acceder a estas edificaciones; hay mucho desconcierto, bronca y, sobre todo, falta de creencia, la palabra mentirosos es la que más escuché de estos sectores para referirse a la administración del gobernador Insfrán», añadió.
«Hoy todo se sabe, todo trasciende, las nuevas tecnologías aplicadas en la comunicación, permite a cualquier persona saber lo que pasa dentro de la casa de su vecino, o en la vivienda de un desconocido que vive al otro lado de la ciudad», ejemplificó.
«Quienes esperan su módulo saben que se estuvieron entregando unas pocas casas, en total no deben llegar a quince; esto es lo que molesta, lo que enciende la bronca; la falta de claridad se traduce en una ausencia de estrategia institucional en materia habitacional, y la razón está en el uso de la política barata de encarar las cosas», reafirmó.
«Para terminar con estas prácticas, exijo el regreso de los sorteos públicos, ante un escribano, y, de ser posible, en un ambiente lo suficientemente grande como para que todos los interesados puedan observar en vivo el acontecimiento», propuso Olivera.
«También debería hacerse público la identidad de los beneficiarios, durante el sorteo, y a través de los medios de comunicación», agregó.
«La gente está hastiada de las mentiras y de los punteros embusteros, es hora de manejar la cosa pública con probidad y transparencia; en definitiva, somos representantes del pueblo y nos eligen para eso», cerró.
