Se trata del inspector Gabriel Isassi, el oficial mayor Fabián López y el oficial José Nievas. Serían indagados entre el domingo y el lunes. En estos momentos además la Justicia está allanando sus viviendas.
Los tres policías acusados de disparar y matar a Lucas González se entregaron este sábado por la tarde. Lo hicieron luego de que el juez que interviene en el caso, Martín del Viso, ordenara su inmediata detención. En estos momentos la Justicia está allanando sus viviendas, y además los detenidos están siendo trasladados a la sede de la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal en Villa Lugano.
Según pudo averiguar TN, los fiscales acusarán a los agentes por homicidio doblemente agravado por su condición de efectivos de una fuerza de seguridad y alevosía (por estado de indefensión de los chicos que viajaban en el auto baleado).
Los policías arrestados serían indagados entre el domingo y el lunes, y al análisis Dermotest para detectar residuos de pólvora en sus manos será realizado por peritos de Gendarmería. A su vez, uno de los fiscales acaba de hablar con la madre de Lucas para comentarle detalles sobre el estado actual de la investigación.
Pasadas las 15 un grupo de agentes de la Policía Federal llegó a la sede de Investigaciones de la Policía de la Ciudad ubicada en Barracas, donde se entregaron los tres agentes, para proceder a su detención formal.
Los acusados son el inspector Gabriel Isassi, el oficial mayor Fabián López y el oficial José Nievas, quienes se desempeñaban en la brigada de Sumarios e Investigaciones de la Comuna 4 de la Policía de la Ciudad. Allí aguardaban la detención y serían indagados entre este sábado o el domingo.
Los tres están acusados del delito de “homicidio agravado por haber sido perpetrado por miembros de las fuerzas policiales abusando de sus funciones”, imputación que prevé la pena de prisión perpetua.
Los fiscales Leonel Gómez Barbella, a cargo de la fiscalía nacional en lo Criminal y Correccional 32, y Andrés Heim, a cargo de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin) habían pedido el viernes por la noche la detención, por considerar que existía riesgo de fuga, pero el juez recién firmó las órdenes este sábado.
Por otra parte, los amigos de Lucas, que viajaban en el auto el día del crimen, declararán como testigos durante la semana.
El velatorio del adolescente de 17 años, que jugaba en las divisiones inferiores del club Barracas Central, estaba previsto para este sábado a partir de las 16:30, pero todavía no se inició porque el cuerpo del chico aún no llegó a la casa velatoria.
El informe preliminar de la autopsia que le realizaron al cuerpo de Lucas González confirmó que el futbolista murió por un disparo en la cabeza, confirmaron a TN fuentes de la investigación.
El estudio se realizó en la Morgue Judicial de la calle Viamonte y está firmado por el doctor Alejandro Rulan.
El reporte sostuvo que Lucas González tenía “una lesión de un proyectil de arma de fuego en el cráneo” y concluyeron que el chico murió por “una hemorragia meningoencefálica”.
Cómo fue el crimen de
Lucas González en Barracas
Lucas murió el jueves tras varias horas de agonía en el Hospital de la localidad bonaerense de Florencio Varela tras ser baleado en la cabeza por los efectivos de la fuerza porteña.
Los tres agentes de la Policía de la Ciudad le dispararon al menos 12 veces al auto en el que viajaba la víctima, aunque la versión policial mencionó que el vehículo escapaba de un control y que incluso les habían mostrado un arma.
