San Lorenzo se llevó tres puntos de oro a Boedo de manera agónica y gracias a su nuevo goleador: Andrés Vombergar, quien había ingresado hacía pocos segundos, empujó la pelota debajo del arco para el 1-0 que sería definitivo. De esta manera, el Ciclón privó a Argentinos Juniors de subirse a lo más alto de la tabla de la Liga Profesional, a la espera de lo que haga más tarde Atlético Tucumán (recibe a Newell’s).
En La Paternal se luchó y discutió más de lo que se jugó. A pesar de que ambos cuentan con material para desplegar algo de fútbol, se terminó haciendo un partido decididamente discreto, de esos que dan la sensación de ser del que “hace el gol, gana”. Y así sucedió, tras el desborde de Iván Leguizamón y el buscapié para el solitario Vombergar (había entrado por el Perrito Barrios), quien apareció como un fantasma para dar un pase a la red y hacer delirar a todos los Azulgranas.
Aunque con escaso material y sumergido en muchos problemas institucionales, Rubén Darío Insúa hace malabares para sacar puntos con un equipo que se ubicó en la novena posición de la tabla y quedó a 4 de la clasificación a la Sudamericana. Dolorosa será esta caída para los de Gabriel Milito, que además de perder la chance de quedar como puntero del certamen, no consiguió afirmarse en zona de entrada a la Libertadores 2023 e igualar momentáneamente la línea de Racing en lo más alto de la Acumulada 2022.
