Por segundo día consecutivo, los artistas se encontraron en el escenario del Hipódromo de Palermo y fueron ovacionados por la multitud
Bizarrap la volvió a romper en la noche de Buenos Aires. Por segundo día consecutivo, brindó un show que sorprendió a los 20 mil espectadores que lo esperaron desde el comienzo de la tarde cuando se abrieron las puertas del Hipódromo de Palermo.
Y desde allí, otra vez en un espectáculo repleto de luces y sonidos, el músico se ubicó dentro de las estructuras dispuestas en forma de óvalo y con un ángulo de producción artística en 360 grados, con una nave central que lo tuvo como protagonista de la noche.
Con entradas agotadas para las tres presentaciones – queda un show más el sábado a la noche-, Bizarrap ya se consagró como un músico multifacético, desde sus inicios hace apenas cinco años o seis años, desde que comenzó a subir sus primeros trabajos a YouTube. También pasaron tres desde que muchos artistas quisieron grabar junto a él porque al parecer todo lo que pasaba por su computadora sumaba millones de reproducciones en Spotify como también vistas en Youtube.
En ese sentido, su trabajo con Shakira se convirtió en un hito de la música latina al alcanzar las 54.3 mil reproducciones en sus primeras 24 horas y posicionarse en el 1 de la lista global de Top Canciones por cuatro semanas consecutivas.
En ese momento, Biza anhelaba cantar junto a la colombiana y se dio una situación similar con ella, cuando uno de sus hijos le sugirió que tenía que hacer un tema junto al artista argentino.
En esta ocasión, durante el show del viernes por la noche, Biza volvió a entusiasmar al público con un despliegue musical y una puesta en escena digna de una fiesta electrónica. Y también tuvo de invitado especial otra vez a Duki. Ya en el día jueves el músico había subido al escenario para acompañar a su colega y amigo.
Este viernes, Duki fue ovacionado cuando dijo unas sentidas palabras que hicieron poner en silencio a todos los presentes. Al referirse a Biza, el artista comenzó diciendo: “Realmente es una persona que no solamente tiene buen gusto sino que tiene buen criterio, es un chabón que se la pasa encerrado en el estudio, que laburó un montón y lo más importante de todos es que Biza es igual que ustedes. Porque Biza sabe ponerse en el lugar de un fan. Biza es fanático de los artistas con los que trabaja. Biza es como todos ustedes”.
El público lo escuchó atentamente y cada vez que nombraba a su ídolo estallaba en aplausos y ovaciones. “Y eso es lo más alto de Biza y lo que nunca van a entender. Biza se da el lugar de ponerse en el lugar de ustedes, que empatiza con ustedes y es un fanático nuestro y por eso hace las canciones como las hace y por eso le va como le va. Y al que tenga alguna duda que venga y lo compruebe. Así es este wacho”, dijo entre los miles de aplausos.
Bizarrap, cuyo nombre real es Gonzalo Conde, tiene 24 años y nació en Ramos Mejía. El productor, que usa un estudio que imita su habitación, llega a niveles profesionales para crear sesiones que le permitieron colaborar, en tan solo 4 años, con grandes artistas.
Él mismo, en una charla que brindó en el Luna Park durante la Experiencia Endeavor Sub20, destacó ante 8 mil estudiantes del último año del secundario de las escuelas de la Ciudad de Buenos Aires: “Fue un proceso de un montón de años. Había empezado editando en la computadora. Empecé a usar la computadora para editar videos, haciendo videos de stop-motion. Empecé a hacerlo con mi primo Rodri, que hoy está acá. Unos años después, la usé para editar más audio que video. Ahí fue cuando me descargué el FL Studio y empecé a componer música. Yo tendría 13 años, más o menos. No sé en qué momento empecé a hacerlo más profesional o a dedicarme a eso. Pero desde que empecé, todos los días estaba tres o cuatro horas, a veces más, produciendo. Así, desde hace 10 años. Sin para ni un segundo”.
