En la conferencia de prensa brindada por el gobernador Gildo Insfrán, en la mañana de este miércoles 31 de enero, donde anunció un incremento de haberes del 25% para agentes estatales, el primer mandatario también se refirió a otro tema de suma relevancia actual, que afecta a un importante sector de los trabajadores: la paralización por parte de Nación de la obra pública.
Inició expresando que “la Cámara Argentina de la Construcción está sumamente preocupada porque hay más de 3200 obras en ejecución en el país que ahora se encuentran totalmente paralizadas”.
Aclaró que “Nación es una entelequia, porque en las provincias es donde se recaudan los recursos” y agregó que lo enviado desde el Estado nacional “son recursos que nos corresponden”.
Aquí, señaló que, actualmente, “por orden de él (el presidente Javier Milei) se suspendieron las viviendas, caminos en construcción y las obras que estaban con financiamiento ya firmado con organismos multimediales de créditos, o sea internacionales”.
Y ante esto, esbozó con preocupación: “La verdad es que la situación es muy grave”.
Asimismo, expuso que “la preocupación de la Cámara Argentina de la Construcción significa que tiene el problema de que debe despedir más de 300 mil empleados, porque no tiene obras públicas”.
Asimismo, sostuvo con firmeza que el proyecto nacional es “uno que ya ha fracasado”, en referencia a que “la obra pública debe hacerlo el sector privado”, explicando que “este sector no va a venir a invertir en un lugar en donde no va a tener rentabilidad”.
“Esto ya está demostrado, porque ha fracasado en distintos países e incluso en la Argentina, durante el mandato de Mauricio Macri”, cerró.
