Fuentes policiales informaron que el hecho se produjo en la calle Catamarca al 1500 del barrio porteño de San Cristóbal, donde una mujer pidió ayuda y hacia su casa fueron el inspector Alejandro Niz y el oficial mayor Germán Luguercho, de la Comisaría Vecinal 3 B de la Policía de la Ciudad.
Los uniformados hallaron al bebé Miguel sin signos vitales, por lo que le hicieron maniobras de RCP y descubrió que dentro de su garganta poseía un trozo de bolsa de nylon. La retiraron y el menor comenzó a llorar desconsoladamente al tiempo que segregaba sangre de la boca.
Los oficiales condujeron al pequeño junto a su madre al Hospital Ramos Mejía, debido a la urgencia que requería el caso, y fue asistido en la guardia pediátrica.
La médica que lo recibió informó que el menor habría sufrido un principio de asfixia, por lo que lo estabilizaron y quedó en el nosocomio en observación.
La profesional destacó la excelencia de la labor policial. (NA)