El martes al mediodía se produjo una rotura en el acueducto principal que alimenta a la Planta Potabilizadora Central, esto obligó a parar la producción de agua en dicha planta que afectó a gran parte de la Ciudad. Los trabajos de reparación se prolongaron durante toda la tarde hasta pasada la medianoche de ayer, cuando tras ser finalizados se normalizó el servicio. En contacto con el Grupo de Medios TVO, el gerente de Aguas de Formosa, Ing. Alfredo Gusberti se refirió a lo ocurrido y comentó que la planta del Circuito Cinco abasteció de agua a la Ciudad mientras se ejecutaba la reparación.
Primero, al hablar de lo que pasó dejó en claro que «son dos acueductos uno de plástico más nuevo y más chico y el otro original de la planta que tiene casi 70 años que es de hierro fundido, este último es el tuvo una falla en un tramo seguramente vinculado a sus años y la forma en que a veces trabaja».
«Se trató de una fisura típica de una onda de presión que se origina normalmente en las cañerías, cada vez que se operan las bombas a pesar de hacerlo con cuidado por algunos motivos se paran entonces se generan estos tipos de ondas de presión para la cual las cañerías son calculadas obviamente pero con el paso del tiempo la misma se va debilitando entonces aguanta menos», continuó explicando.
Al referirse al trabajo realizado tras el hecho expuso: «lo que nosotros hacemos es acceder a la cañería que a veces es la parte que más cuesta porque todo eso está en este caso bajo pavimento, aparte de romper el mismo hay que sacar todo el barro porque cuando se rompe un caño -y más aún de ese tamaño- enloda toda la zona alrededor y se hace difícil acceder y preparar el lugar para la reparación, eso nosotros a las 22 horas recién lo logramos, y en un par de horas ya pudimos reemplazar el caño».
Por otro lado, Gusberti confió que el inconveniente les permitió probar cómo abastece la Ciudad la planta del Circuito Cinco y «si bien no era un día de mucho consumo nos permitió ver que aunque el servicio en algunos sectores se resintió en general las cisternas cargaban». «Pudimos medir cómo trabaja la planta de la zona norte en caso de tener que utilizarla para abastecer la totalidad de la Ciudad, obviamente no alcanza para tener un servicio con las presiones habituales pero se pudo operar y el hecho de tener las cañerías con por lo menos niveles de presión bajos es lo que nos permitió rápidamente recuperar el servicio una vez que llegó el agua a la planta», aclaró.
Seguidamente, el Ingeniero recalcó que la cañería reparada «está trabajando con el 50% de su producción, durante algún tiempo la vamos a estar controlando y todo el proceso de normalización de operación llevará varios días pero eso el usuario no lo va a sentir».
«Después nos queda la parte de reparación del propio pozo que se hizo, si se comprueba de que no hay filtraciones y no hay nada que ajustar entonces se hará el trabajo de relleno y compactación adecuada para luego proceder a la pavimentación», afirmó, agregando que muchas cañerías importantes están bajo pavimento y cuando ocurre algún problema tienen que que romperlo para acceder a ellas.
«Tuvimos la colaboración de la Municipalidad, del Servicio provincial de Agua Potable y de empresas locales que nos dieron una mano con la logística para que los tiempos fueran los mínimos posibles», finalizó el titular de Aguas de Formosa.
